Vitaminando los despertares!

Y es que lo bueno de comer 5 o 6 veces al día es que las posibilidades son infinitas, cambios y más cambios para no aburrirte. :)

 

Hace poco leí algo que me pareció bastante interesante y que me vino de perlas para un cambio en la distribución de mis comidas en que llevaba pensando  hace bastante tiempo, y más concretamente en lo que a frutas se refiere.

 

Lo que leí fue que se recomendaba comer fruta con el estómago vacío, la razón es que según parece las frutas no son digeridas en el estómago, sino en el intestino delgado; pasan rápidamente por el estómago para llegar al intestino donde se absorben sus nutrientes.

Si el estómago estuviese ocupado, entonces la fruta queda bloqueada y comienza a fermentar antes de digerirse.

Esto no significa que sólo deba comerse en ayunas, pero sí, antes de las comidas o cuando llevas al menos un par de horas sin ingerir alimentos sólidos.

Por lo tanto comer la fruta a media mañana o media tarde como tentempié en principio está perfecto, si es el comienzo (o lo único) de tu tentempié.

 

Yo por mi parte he decidido empezar las mañana hipervitaminada, a tope de fruta!, mi tradicional zumo de naranja y pomelo seguido de un batidazo multifrutas a escoger según apetezca. :)

La verdad es que llevo así un par de semanas y fenomenal, mientras me tomo el zumo me preparo el batido, posibilidades infinitas; y después a media mañana en vez de la fruta que toba antes ahora me tomo mi súper tostada o bocadillin de pan de centeno con mi cola de caballo y según que día mi puñado de frutos secos,  perfecto!.

 

Y como últimamente voy probando y probando, os cuento algunos de mis batidos preferidos...

 

-. Fresa, plátano, yogur líquido de avena, un pelín de leche y mis ya habituales semillas chía. También he probado  hacer sólo con fresa o sólo con plátano y en lugar de yogur líquido con leche y salvado de avena, buenísimo también.

 

-. Una receta adaptada (simplificada): melón, piña (y parte de su jugo), zumo de limón y mi chía, súper diurético.

 

 

-. Y siguiendo con la piña, que es muy cómoda porque empleo las rodajas de bote de piña en su jugo por lo que siempre tengo a mano, dos kiwis, dos rodajas de piña (y su jugo) y el zumo de medio limón, cuidado si te pasas con el limón que se te queda la cara como al Fary. Y mi chía por supuesto que siempre pega.

 

 

Como habréis observado las semillas chía caen siempre si o si; ¿sabéis la de beneficios para la salud que tienen?, otro día hablaremos de esto.

Mientras tanto yo sigo aquí experimentando, aún me queda probar con la sandía, ciruelas, melocotón y frutitas mil…ya os iré contando.

 

Y en relación al mundo de los batidos un truco muy útil: ahora que todavía hay fresas pero se estropean pronto, compra una buena caja, que además ahora están muy baratas, lávalas, córtalas en trozos y al congelador; tira de ellas cuando te apetezca un batido, riquísimo y fresquísimo.

 

Por lo tanto que la fruta es sanísima lo sabemos tod@s, pero quede claro que el orden de los factores, en este caso, SI altera el producto.

Y para aquellas personas cuyo objetivo sea perder peso, olvidad la opción de frutas como parte de la cena porque del mismo modo que por la mañana ayudan a acelerar el metabolismo, ya que lo hacen cuando estamos en actividad, por la noche, al descansar, lo ralentizan.

Tampoco es que sea un pecado mortal, es fruta, sanísima e hipocalórica,  pero no dejan de tener hidratos de carbono y azúcares, ya ya sabemos que éstos mejor más temprano ;).



Así que venga, Anímate y vitamina tus despertares, son todo beneficios!

I.